La incertidumbre se ha establecido en todos los ámbitos económicos porque nadie es capaz de predecir cuánto va a durar el terrible conflicto armado, hasta cuándo será capaz Rusia de aguantar las sanciones económicas que ya le han impuesto Europa y Estados Unidos, ni tampoco hasta dónde se extenderán éstas.
Es innegable que España siempre ha sido un país eminentemente turístico y que va a seguir siéndolo según vayamos remontando la pandemia. Los datos del año 2021 comienzan a ser esperanzadores, pues ya nos visitaron 31,1 millones de turistas extranjeros, frente a los sólo 18,9 millones del año anterior.
Empezamos este año con un ligero optimismo por parte de la Comisión Europea en lo referente al crecimiento del PIB español, un 5,6% para 2022, una décima más de lo que preveía dos meses antes.
La locura bélica emprendida por Putin en Ucrania continúa elevando la terrible cifra de víctimas mortales. Asimismo, la guerra ha destrozado todas las perspectivas de recuperación económica inmediata que vaticinaban los expertos y organismos internacionales, sometiéndola a una ralentización que será proporcional a lo que dure la invasión rusa.
Es evidente que, en estos momentos, la apuesta política de futuro a nivel mundial para la movilidad pasa por el coche eléctrico para evitar la contaminación. En España, en concreto, la ley de Cambio Climático, aprobada por el Congreso de los Diputados el año pasado, establece la prohibición de vender vehículos nuevos de combustión, no destinados a usos comerciales, a partir del año 2040.
Hace apenas dos meses, todas las previsiones económicas de los principales organismos nacionales e internacionales coincidían en señalar un final de año de cifras espectaculares en torno a la recuperación del consumo y de la economía española en general.
En cifras, el estudio de Deloitte anticipa que el gasto medio por hogar será de 631 euros, lo que supone un 14% de incremento respecto a la Navidad de 2019, justo antes de la aparición de la pandemia, cuando el gasto se situó en los 554 euros.
Uno de los índices más relevantes en torno al consumo, y al que en términos generales no se le presta la atención que merece, es el Indicador de Confianza del Consumidor.
Los últimos datos publicados por el Banco de España, relativos al mes de septiembre, en cuanto a los créditos concedidos por las entidades financieras a las familias e instituciones sin ánimo de lucro, constatan un suave descenso paulatino de las necesidades de financiación durante los tres últimos meses.