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Además del mes de las compras, las cenas de empresa y el reencuentro con la familia, diciembre también es el periodo más idóneo para realizar ese viaje familiar tan esperado, el Puente de la Constitución y las fechas navideñas aportan suficientes días libres para poder hacer realidad una escapada más allá de la visita a los familiares en el pueblo.
Los asientos previstos en vuelos internacionales para el mes de diciembre alcanzan este año los 8,1 millones, un millón más que en el año 2022 según los datos ofrecidos por el Ministerio de Industria y Comercio. Según los datos gubernamentales, el incremento respecto al mes de diciembre del año pasado es del 14,2%, con Reino Unido, Alemania e Italia a la cabeza, y con Polonia, República Checa y EE.UU como los destinos que más crecimiento experimentan en relación a hace un año.
Como vemos, algunas de estas escapadas navideñas van ganando fans año a año, en cualquier caso, repasamos las opciones más interesantes para disfrutar en estas fechas.
Los mercadillos tradicionales de Navidad en diferentes ciudades españolas suponen un atractivo para todos los amantes de esta época del año. El mercadillo de la Plaza Mayor de Madrid es uno de los más famosos y que más turismo consiguen atraer, unido al incentivo de la decoración navideña en las calles, lo que ya supone en sí mismo un atractivo. Todo aquellos que se pasen por este mercadillo podrán encontrar una de las mayores ofertas de adornos navideños, así como todo tipo de parafernalia para los amantes de los complementos de lo más peculiares: desde pelucas de colores, artículos de broma o gorros de elfo con luces y música incorporada.
Con 236 años de historia, la Fira de Santa Llúcia es un mercadillo que se celebra cada año en el barrio gótico de Barcelona y que tiene como telón de fondo la magnífica catedral de Santa Eulalia. En este mercadillo podrá encontrarse la tradicional figura catalana del ‘caganer‘ que cada año se actualiza representando a personalidades del mundo de la política nacional o internacional. Una curiosidad es la instalación de un ‘Tió de Nadal gigante‘, un tronco que, según la tradición catalana, después de cantarle un villancico se debe golpear con palos para que ‘cague’ regalos para los niños en Nochebuena.
Pero hay quien da un paso más en su pasión navideña y se aventura a disfrutar de alguno de los magníficos mercadillos tradicionales que proliferan en estas fechas por toda Europa.
El Mercadillo de Budapest (Hungría) fue nombrado el mejor mercado navideño europeo del año 2022, debe parte de su atractivo a su ubicación junto a la impresionante Basílica de San Esteban.
El Dezember Markt de Viena, que data de 1296 o ciudades como Praga, Tallín, Berlín o Brujas cuentan con suficiente atractivo para hacer las delicias de los más aficionados en estas fechas navideñas.
También los hay que prefieren aprovechar la ocasión para cruzar el Atlántico y disfrutar de las compras en un ambiente navideño diferente como el que ofrece Nueva York, otro de los destinos que se ha convertido en tradicional para estos días. Visitar el árbol de Navidad del Rockefeller Center, el centenar de pistas de patinaje repartidas por la ciudad o simplemente pasear por la oferta visual que proporcionan los escaparates de Manhattan, suponen la delicia de cada vez más españoles que aprovechan estos días para hacer una escapada.
Y, pensando en los más pequeños de la familia, nada mejor que disfrutar del mundo mágico que ofrece Disney en sus parques de atracciones, sobre todo este año que el mundo de fantasía cumple los 100 años. Disneyland París ofrece la alternativa más accesible por cercanía, pero también los hay que aprovechan para disfrutar a lo grande de las mil opciones que proporcionan los diferentes parques de la factoría en Disneyworld Orlando.
Otra opción para los más pequeños, es Laponia y una inmersión total en el mundo y la iconografía de Santa Claus. Visitar la propia casa de Papa Noel en Rovaniemi, proporcionará una experiencia inolvidable para los pequeños de la casa, que podrán disfrutar de un paseo en trineo tirado por renos por sus infinitos paisajes helados y, con un poco de suerte, se podrá disfrutar incluso de la impresionante visión de la aurora boreal.
Las opciones son muchas y de lo más variadas, sólo falta tener ganas de disfrutar de la Navidad y realizar una buena planificación que permita afrontar el gasto que, lógicamente, supone cualquiera de las opciones elegidas. Diseñar con tiempo el viaje, estudiar las diferentes posibilidades y contar con la financiación adecuada puede ayudar a que, llegadas estas fechas, la única preocupación sea la de disfrutar al máximo de la magia de estos días.
Sea cual sea vuestra opción, ¡feliz Navidad!
