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Durante el último año, se ha especulado con distintas cifras respecto a los efectos económicos negativos que está produciendo la pandemia en distintos sectores, especialmente en la hostelería, el ocio y el turismo.
Ahora el Banco de España acaba de ponerle “cara” a la gran ralentización del consumo que se ha detectado en los nueve primeros meses del año 2020 (último dato disponible hasta el momento). Según el supervisor, los españoles han atesorado en ese periodo en las entidades financieras más de 30.000 millones de euros de “ahorro forzoso acumulado” como consecuencia de las restricciones establecidas por el Covid 19.
Esta cifra supone aproximadamente un 2,5% del Producto Interior Bruto de España. Ahora bien, se trata de una cifra más bien conservadora, pues el Banco de España lo atribuye principalmente a gastos habituales que los consumidores realizan cuando no existen restricciones de ningún tipo.
Sin embargo, el supervisor financiero va más allá y precisa que en el periodo comprendido entre enero y septiembre de 2020 se ha registrado un ahorro equivalente a 3,5 puntos del PIB superior a la media establecida en los nueve primeros meses de los últimos cinco años. Ese porcentaje de ahorro se traduciría en cerca de 40.000 millones de euros.
Por tanto, los consumidores cuentan en la actualidad con una enorme bolsa de liquidez disponible para ponerla en circulación en los mercados en el momento en que la situación empiece a normalizarse con el desarrollo masivo de las vacunaciones. Esa será sin duda la mejor medida económica que se puede poner en marcha para paliar la crisis y alcanzar la cuota del 60-70% de población vacunada antes del próximo verano, según han manifestado economistas que han intervenido recientemente en los “Encuentros de la Vanguardia”. Estos expertos, también advierten de que un retraso de tan sólo tres meses en alcanzarse ese porcentaje de vacunaciones podría originar una pérdida en el crecimiento del PIB superior a los dos puntos.
Por su parte, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) acaba de enviar un mensaje de optimismo dirigido a la población española a través de sus previsiones de crecimiento para este año y el próximo. La OCDE ha elevado del 5 al 5,7% el rebote de la economía española en 2021 y también ha incrementado en ocho décimas el crecimiento para 2022, al elevarlo al 4,8%, en lugar del 4% previsto anteriormente. Ahora bien, el citado organismo insiste también en el aumento de la vacunación, ya que la normalización del turismo es vital para la economía española.
Son datos muy esperanzadores para nuestro país, que, según las previsiones de la OCDE, será el sexto de mayor crecimiento de los que componen el G20, sólo por detrás de India, China, Estados Unidos, Turquía y Francia.
En definitiva, en cuanto se den las condiciones sanitarias adecuadas, salir de esta crisis debería acarrear menos dificultades que en otras sufridas anteriormente, véase la financiera ocurrida a partir de agosto de 2008. La activación del consumo en España supondrá un impulso definitivo y notoriamente más rápido de la recuperación de la economía.
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